Como en el mundo entero, para gustos colores.
Mi clase de alemán es un grupo muy heterogéneo. Por un lado estamos los normales (remarco estamos), gente más o menos mayor, que está interesada en lo que hace en clase y que con más o menos esfuerzo saca las cosas.
Por otro lado, están los raritos freaks del manga. No sé si son fans del manga, pero la mayoría son estudiantes jóvenes (normalmente futuros ingenieros) que faltan mucho a clase porque tienen exámenes o trabajos para hacer. Son de una generación que consulta los libros por el móvil, porque se los han descargado en pdf del ordenador. Me sorprenden, pero me divierten.
Por otro lado, están las viejas que no se enteran de nada. Son 2. Una es mayor y feliz, la otra es más joven y marisabidilla. No las aguanto, me agotan, lo preguntan todo y nunca se enteran de nada. Además me siento muy cerca de ellas y siempre me preguntan. Si sé la respuesta, se la digo. Si no la sé, las ignoro completamente. La Marisabidilla un día obligó a la profesora a cambiar el temario de la clase porque no habíamos corregido unos deberes. Luego le dijo a la otra que gracias a ella la clase se había enterado de cómo funciona el pluscuamperfecto en alemán (por favor, el pluscuamperfecto en alemán es igual que en catalán, francés o español, no hace falta un master en Yale para deducir que un auxiliar en imperfecto + participio es un pluscuamperfecto). Pero ella a su bola.
Pero el premio a Miss Pronto Te Asesinaré es una chica estudiante también (no sé lo que estudia, nunca he hablado con ella) que es la empollona de la clase. Es muy muy muy rara, siempre sabe las respuestas y se dedica a corregir a los demás. Los raritos freaks del manga la llaman Pícara (me contó uno que es porque tiene un mechón de pelo blanco en el flequillo como un personaje de X-Men). Un día estábamos en grupitos discutiendo sobre unas preposiciones y ella en voz alta dijo una. La profe le preguntó el por qué y ella le contestó. Sin decir nada al resto, la profe le asintió con la cabeza pero lo peor fue ver la cara de placer que puso (¿se puede tener un orgasmo acertando una preposición en alemán?) viendo como el resto seguíamos pensando. Supongo que en su cabeza pensó: ¡seres inferiores, adoradme! Lo peor es cuando habla. No se la entiende, y cree que tiene un acento alemán que ya lo quisiera para sí Angela Merckel. El mejor momento de la clase es ver la cara de los raritos cuando se empiezan a descojonar cada vez que ella tiene que leer en voz alta.
Patio de colegio.
Mi clase de alemán es un grupo muy heterogéneo. Por un lado estamos los normales (remarco estamos), gente más o menos mayor, que está interesada en lo que hace en clase y que con más o menos esfuerzo saca las cosas.
Por otro lado, están los raritos freaks del manga. No sé si son fans del manga, pero la mayoría son estudiantes jóvenes (normalmente futuros ingenieros) que faltan mucho a clase porque tienen exámenes o trabajos para hacer. Son de una generación que consulta los libros por el móvil, porque se los han descargado en pdf del ordenador. Me sorprenden, pero me divierten.
Por otro lado, están las viejas que no se enteran de nada. Son 2. Una es mayor y feliz, la otra es más joven y marisabidilla. No las aguanto, me agotan, lo preguntan todo y nunca se enteran de nada. Además me siento muy cerca de ellas y siempre me preguntan. Si sé la respuesta, se la digo. Si no la sé, las ignoro completamente. La Marisabidilla un día obligó a la profesora a cambiar el temario de la clase porque no habíamos corregido unos deberes. Luego le dijo a la otra que gracias a ella la clase se había enterado de cómo funciona el pluscuamperfecto en alemán (por favor, el pluscuamperfecto en alemán es igual que en catalán, francés o español, no hace falta un master en Yale para deducir que un auxiliar en imperfecto + participio es un pluscuamperfecto). Pero ella a su bola.
Pero el premio a Miss Pronto Te Asesinaré es una chica estudiante también (no sé lo que estudia, nunca he hablado con ella) que es la empollona de la clase. Es muy muy muy rara, siempre sabe las respuestas y se dedica a corregir a los demás. Los raritos freaks del manga la llaman Pícara (me contó uno que es porque tiene un mechón de pelo blanco en el flequillo como un personaje de X-Men). Un día estábamos en grupitos discutiendo sobre unas preposiciones y ella en voz alta dijo una. La profe le preguntó el por qué y ella le contestó. Sin decir nada al resto, la profe le asintió con la cabeza pero lo peor fue ver la cara de placer que puso (¿se puede tener un orgasmo acertando una preposición en alemán?) viendo como el resto seguíamos pensando. Supongo que en su cabeza pensó: ¡seres inferiores, adoradme! Lo peor es cuando habla. No se la entiende, y cree que tiene un acento alemán que ya lo quisiera para sí Angela Merckel. El mejor momento de la clase es ver la cara de los raritos cuando se empiezan a descojonar cada vez que ella tiene que leer en voz alta.
Patio de colegio.
2 comentarios:
Qué fort! La meva clase de japo és exactament igual! Potser va la mateixa gent a un i altre idioma!!!!!
En mis clases de español tengo lo mismo... alucina porque yo soy la profesora. En el curso avanzado tengo a tres que he bautizado "tonto lava a las tres", uno me dijo el otro día que en Argentina hablaban dialectos extranjeros y que por eso él no entendía; y los otros dos que ellos lo que querían era hablar como la gente de la calle... a lo que me hubiera gustado contestar: mira, entonces, ponte a vivir en las calles de Madrid o Barcelona para hablar como la gente de la calle. En fin, aquí no hay frikis del manga, aquí lo que hay son "tontos a las tres"!
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